Tuesday, December 21, 2010

Kopi Luwac una experiencia única

Kopi Luwac una experiencia única ; A raíz de una nota que escribí en esta columna el pasado junio sobre el Kopi Luwac, el exótico café Malayo reconocido a nivel mundial por el singular método de procesamiento que lo hace único, recibí sorpresivamente vía correo certificado unos gramos de este café enviados desde Yogyakarta, Indonesia por una amiga que tengo allí, lectora ocasional de mis artículos y cultora de temas que tienen que ver con latino América.

Sin pensarlo dos veces me puse en contacto con Juan Pablo Villota, el mentor del Café San Alberto, (una de las marcas de cafés especiales reconocida en el Quindío, Colombia y en varios países a donde se exporta con gran éxito) y coordinamos para llevar a cabo una “degustación” especial en la Terraza San Alberto en Buenavista, precisamente para aprovechar el grado de conocimiento de Juan Pablo en temas de cafés especiales, y de esta forma poder sacar el mayor grado de satisfacción de esta experiencia única para todos los que tuvimos ocasión de vivirla.

Para los que no leyeron mi columna anterior sobre este tema, les cuento que la peculiaridad de este café tiene que ver con el proceso de procesamiento del grano, el cual se hace en el estómago de un animal similar a un gato grande al cual se le da de comer los mismos y para poder luego elaborarlo, posterior a la ingesta, digestión y expulsión del café; el animal en cuestión es un Luwak, que vive en los cafetales de las islas de Indonesia, alimentándose de los granos de café más óptimos en su estado de maduración. El metabolismo de este animal digiere la parte más carnosa desechando las semillas, las cuales son recogidas a mano por los hombres y son vendidas a precios exagerados que rondan alrededor de 750 euros por kilo. Y pensar que son semillas recolectadas de los excrementos de este animal.

Quien mejor que Juan pablo para narrar esta experiencia única desde su conocimiento alrededor de la cata:
“Un café exótico como el Kopi Luwak nos brinda una sensación única para los sentidos, con atributos bastante diferentes a los cafés de nuestras latitudes. Es un café con aroma dulce y muy especiado. En boca una bebida con baja acidez, poca amargura y cuerpo alto. Presenta principalmente fuertes notas de madera y nuez, con un prolongado sabor residual. Es una taza bastante compleja con muchos sabores, algunos de ellos pocos comunes de encontrar en un café, me atrevería a describirlas como mentoladas cercanas a eucalipto y leves sabores herbales”.

Sin duda el proceso de fermentación en el sistema digestivo del animal, comparado con el tradicional proceso de fermentación en agua, hace que el café presente sabores y atributos particulares para quien está acostumbrado a los delicados y finos cafés lavados colombianos.

Probar este café fue una experiencia memorable que ratifica que el mundo de los cafés cada día se asemeja más al mundo de los vinos, donde podemos encontrar infinidad de productos con diferentes perfiles y sabores capaces de satisfacer a los más sofisticados paladares.

Un café exótico es difícil de comparar con un café súper Premium, un Kopi Luwak y un San Alberto en la misma mesa nos regalan sensaciones diametralmente opuestas pero igualmente exquisitas y memorables para los sentidos.
¿Recuerdan la película “Ahora ó Nunca”? (“The Bucket List”) me atrevo a pensar que la misma ha servido para dar a conocer al mundo este café único en el mundo. Si quieren conocer esto por ustedes mismos, ingresen a youtube y digiten “The Bucket List - Kopi Luwak”.

Como experiencia única está muy bien, pero recordemos que nosotros tenemos el privilegio, por vivir en el Quindío, de saborear y recrear gratas experiencias alrededor de los cafés nuestros, y sin tener que pagar elevados precios, como los de este particular producto pasado por la digestión de un gato.
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